“Los tropos que a diario escucha la gente en la crónica deportiva inciden o repercuten de manera relevante en nuestra vida diaria, lo que nutre nuestro discurso cotidiano”, señaló la investigadora y docente en Estudios Lingüísticos, del Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades (CUCSH), doctora Sara Quintero Ramírez, en el marco del II Coloquio internacional Tropos: de la elocutio a la construcción de sentido, que organiza el Departamento de Filosofía.
En su ponencia titulada “Donde las arañas tejen su nido: tropos en la crónia futbolística mexicana”, señaló que muchos de sus compañeros trabajan con las metáforas en la literatura, pero ella lo ha hecho con la crónica deportiva, futbolística en especial, en la que abundan los tropos. Al analizar la crónica de varios partidos de futbol, observó que están llenos de campos semánticos que pueden integrarse en varios grupos, tales como las metáforas relacionadas con la guerra, con frases como “balazo”, “bombazo”, “fogonazo”, “cañonazo”, “tirazo”, “zambombazo”, “escopetazo”, “fusilar”, “atacar”, “batir”, “golpear”, “matar”.
Añadió que lo que más abunda en la crónica deportiva es la hipérbole (la exageración), como: “ese penal era de cárcel”. Este tipo de tropos son usados principalmente para llamar la atención del espectador y causar cierta comicidad, porque nos reímos y hasta repetimos la frase después.
Quintero Ramírez agrega que la metonimia también es muy recurrente en la crónica deportiva, que es el hecho de designar una cosa con otra, pero existe una relación entre ambas. Como por ejemplo designar a un futbolista por la posición que juega en su club, por el atuendo que trae o el número que porta. Como decir: “Este fue un gran gol del delantero nativo de Arandas, Jalisco”; “El tapatío fue sacado de La Mancha”, “No ha llegado su majestad”.
La investigadora señala que hay comentaristas que utilizan más tropos que otros, lo que define su estilo y su presencia en la televisión. “Incluso muchos aficionados se llegan a identificar con este tipo de personajes y logran copiar sus frases en su vida cotidiana, lo que contribuye a ampliar su discurso. También por supuesto que este tipo de tropos se extienden a otros deportes, como es el caso del beisbol, donde comentaristas utilizan metáforas como “Le dio en el queso”, “Apagó el cohetón”; “El cuadro no miente”.
Guadalajara, Jal., 14 de septiembre de 2012
Texto: Juan Carrillo Armenta
Fotografía: Archivo
Edición de noticias en la web: Lupita Cárdenas Cuevas