Las ciencias sociales, la influencia más importante de la hermenéutica en los últimos tiempos

Versión para impresiónEnviar por emailPDF version
Inició en la FIL el IV Banquete internacional Fil-o-Sofía: Nuevos enfoques de la hermenéutica

Con una revisión histórica del surgimiento de la hermenéutica moderna en Kant, y pasando por autores como Schleiermacher, Wilhelm Dilthey, Heidegger, hasta llegar a la hermenéutica de la segunda mitad del siglo XX, en sus dos vías principales: Gadamer y Paul Ricouer, hasta nuestros días, que ha tenido una influencia decisiva, sobre todo en las ciencias sociales, el profesor de la Universidad Autónoma Metropolitana, Gustavo Leyva Martínez, comenzó esta mañana el IV Banquete internacional de Fil-o-Sofía, Nuevos enfoques de la hermenéutica, en el marco de la XXII Feria Internacional del Libro de Guadalajara (FIL).

 Leyva Martínez comentó que la hermenéutica moderna podría localizarse en el marco de una recepción y radicalización de la filosofía de Kant, que llevó a cabo un desplazamiento en la reflexión filosófica, conduciendo a ésta desde el conocimiento de los hechos y estados de cosas, hacia el análisis de las condiciones del propio conocimiento. El conocimiento y toda expresión, toda actividad, comenzó poco a poco a ser interrogada en sus condiciones de posibilidad .

 Agregó que es Schleiermacher quien desplaza y a la vez radicaliza la reflexión trascendental desde la crítica de la razón hacia una crítica cuyo propósito no es otro que analizar las condiciones de posibilidad del sentido y de los plexos del sentido, al igual que de la comprensión de estos. Y es justamente en el marco de esta crítica del sentido, donde se localiza el surgimiento de la hermenéutica filosófica (1819), en donde propone desarrollar una teoría de su actividad de interpretación de textos –en principio de los textos religiosos–, que poseyera además pretensiones de carácter científico .

 Dijo que fue a partir de entonces que Dilthey, años más tarde, en 1900, plantea ahora la perspectiva de la intersubjetividad. La individualidad aparece así como una categoría intersubjetiva, que se constituye ya no en la mirada dirigida hacia el interior del individuo mismo, en la conciencia de sus propios estados mentales, sino en el espacio del encuentro con los otros. Así, dentro de todas las formas simbólicas de expresión, es la del lenguaje –especialmente el escrito– la que asumirá un lugar central, por lo que Dilthey definirá la hermenéutica como la doctrina del arte de la comprensión de expresiones de la vida fijadas en la escritura .

  Es aquí donde pueden trazarse los orígenes de las que quizá sean las dos grandes líneas más influyentes en la hermenéutica de la segunda mitad del siglo XX: la iniciada por Gadamer y el camino trazado por Paul Ricouer. En el caso de Gadamer, la hermenéutica asume la forma de una reflexión sobre la continuidad de la tradición y el modo en que ésta se articula en el orden del lenguaje, subrayando en todo momento la posibilidad del diálogo, y en el caso de Ricouer, se comprende como forma de un ejercicio de la sospecha que se propone develar esa arquitectura de sentido que ha colocado sobre la superficie del discurso otra capa de significación que esconde, disimula y reprime un extracto profundo que la actividad de interpretación debe extraer, cuyos exponentes más destacados para él son Marx, Nietzsche y Sigmund Freud .

 Leyva Martínez comentó que la influencia que ha ejercido la hermenéutica en los últimos decenios, ha sido decisiva no sólo sobre la filosofía en general, sino también sobre otras disciplinas y debates intelectuales. La encontramos así en los esfuerzos por redefinir y transformar nuestra comprensión de la ciencia, pero sobre todo, la hermenéutica ha sido decisiva en el ámbito de las ciencias sociales. La teoría social comprende así a la acción humana como actividad interpretativa y ordenada por los agentes, que se articula reflexivamente en el orden del lenguaje .

  En el ámbito de la teoría literaria tampoco puede ser pasado por alto el influjo de la hermenéutica sobre la denominada estética de la recepción . Esta propuesta es una reacción a las vertientes de corte formalista y estructuralista, y se concentró en el rol del lector criticando la consideración del texto literario como un objeto autónomo susceptible de ser analizado ontológicamente .

Guadalajara, Jal., 6 de diciembre de 2008
Texto: Juan Carrillo Armenta
Fotografía: Francisco Quirarte
Edición de noticias: LCC Lupita Cárdenas Cuevas

Etiquetas: