La grieta de 25 metros de longitud y un metro de ancho –en algunas de sus partes más afectadas– que apareció en el cruce de las calles Flor de Guamúchil y Las Rosas, en la colonia Lomas de la Primavera, podría ser parte del mismo proceso que generó la grieta estudiada en el Rancho Los Flores por investigadores de la UdeG, afirmó el doctor Luis Valdivia Ornelas, investigador del Departamento de Geografía y Ordenación Territorial, del Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades (CUCSH).
Los doctores José Guadalupe Rosas Elguera y Luis Valdivia Ornelas, y el maestro José Hidelgardo Gómez Sención, académicos de dicho departamento, iniciarán los estudios a partir de mañana jueves en la zona afectada, y esperan tener un reporte preliminar en quince días. Valdivia Ornelas aclaró que habría que descartar si la grieta no responde a otro fenómeno producido por la presencia de relleno de basura o material en el terreno.
Los investigadores tratarán de definir las características de la grieta, si es una o más, además de su posición, anchura, si presenta desnivel entre un borde y otro y su disposición (orientación), que será de gran utilidad para determinar si forma parte del sistema geológico identificado en campo, a partir de la grieta que se formó el año pasado en el Rancho Los Flores. “Si la grieta tiene la misma orientación o parecida a la que hubo el año pasado, obviamente obedece a los mismos procesos geológicos e hidrológicos. Eso lo determinaremos gracias al trabajo de campo”.
Lomas de la Primavera se ubica aproximadamente a 300 metros aguas abajo de la zona que investigadores de la UdeG estudiaron el año pasado a raíz de la aparición de una grieta en el Rancho Los Flores, por lo tanto lo que harán es ampliar el área de estudio.
El año pasado, los investigadores mencionados trabajaron con los académicos Enrique García Becerra y Samuel Alatorre Ramos, del Centro Universitario de Arte, Arquitectura y Diseño (CUAAD) y del ya referido Departamento de Geografía, respectivamente, en la zona del citado rancho; se hizo un reporte del origen de la grieta que se formó sobre el cauce del Arroyo Seco, en la frontera entre el Valle de Atemajac y la Sierra de la Primavera. Tenía aproximadamente 150 metros de longitud y una anchura variable que alcanzaba medio metro; no afectó ninguna construcción porque es área natural protegida.
En el recorrido los investigadores –que abarcó 300 metros aguas arriba del mencionado rancho y 200 aguas abajo– encontraron seis sistemas importantes de grietas sobre el cauce del Arroyo Seco. Valdivia Ornelas explicó que llegaron hasta una represa cercana a donde se formó la grieta, pero no recorrieron todo el cauce del arroyo en la zona urbana.
Las fracturas y fallas encontradas afectan sedimentos antiguos o muy jóvenes, y eso está relacionado con la evolución geológica de La Primavera, que es una estructura llamada caldera delimitada por grandes fallas anulares sobre las que se han formado cerros como El Colli. Detrás de estas fallas importantes hay otro conjunto u otros sistemas de fallas más jóvenes que están afectando a los sedimentos, y estas fracturas cortan diagonalmente el lecho del Arroyo Seco.
Como se ha urbanizado aguas abajo se ha creado infraestructura hidráulica, y esta acumula temporalmente el agua. Infortunadamente, en algunas zonas donde se acumula tiene lugar el fenómeno de inyección forzada del agua sobre las fracturas y las fallas, y esto ocasiona que haya un rompimiento de la zona débil y se forme la grieta.
A T E N T A M E N T E
“Piensa y Trabaja”
Guadalajara, Jal., 13 de mayo 2015
Texto: Martha Eva Loera
Fotografía: Carlos Zepeda